Comunicado a la Opinion Publica

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La libertad de expresión es una garantía para la democracia, cuya preservación es necesaria; por ello a lo largo de mi vida pública me he sometido al escrutinio y he respetado las opiniones favorables o adversas a mi gestión, porque siempre he sido y seré respetuoso del Estado de Derecho.

Esa misma motivación es la que me obliga hoy a hacer este pronunciamiento, debido a que la nota periodística difundida el pasado 4 de mayo de 2014 en Noticias Uno, dejó en el aire de la ciudadanía una imputación delictiva que se radicó en mi nombre, sin soporte probatorio, transmitida y editorializada sin obtener mi versión sobre tan graves hechos, y por lo cual radiqué la respectiva denuncia penal contra LUIS ALFONSO BARRIOS Y BEATRIZ GONZÁLEZ DE OCHOA.

Es sabido que el ejercicio de la libertad de expresión implica cargas, deberes y responsabilidades constitucionales expresas y ellos han de armonizarse satisfactoriamente con los derechos constitucionales de los demás, y en el presente caso se obró sin el rigor periodístico requerido y desapego de la verdad, ya que se afectó mi buen nombre y honra.

Es por ello que en lo que atañe al citado medio informativo, considero pertinente a la luz de las circunstancias someter al debate de la ciudadanía en su conjunto y de los periodistas en particular, esta especial situación y cedo a Ustedes el interrogante de si cabe o no una rectificación bajo el tamiz de la ética y la responsabilidad de la profesión.

FRANCISCO JAVIER RICAURTE GÓMEZ

 

 

 

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