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Carta del Magistrado Jorge Armando Otálora

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Bogotá, D.C. 11 de julio de 2012    

 

 

Doctor

JUAN MANUEL CORZO ROMÁN

Presidente

H. Congreso de la República de Colombia

Ciudad

 

 

Ref. Presentación de renuncia

 

Respetado Señor Presidente:

 

De la manera más atenta presento ante Usted renuncia irrevocable al cargo de Magistrado de la Sala Jurisdiccional Disciplinaria del Consejo Superior de la Judicatura, a partir del primero (1°) de octubre del año 2012.

 

Por su intermedio deseo agradecer al Congreso de la República haberme honrado con la mayor distinción que pueda tener un abogado, como lo es pertenecer a una Alta Corporación de justicia; tengo la certeza de haber cumplido a cabalidad los mandatos de la Constitución y la ley, sin defraudar la investidura que me fue confiada. Pongo fin anticipado a mi periodo constitucional por razones estrictamente personales.

 

Con sentimientos de aprecio y consideración.

 

Atentamente.

 

 

JORGE ARMANDO OTÁLORA GÓMEZ

Magistrado

 

 

 

 

 

 

 

Bogotá, D.C. 11 de julio de 2012  

 

 

Doctor

JUAN MANUEL SANTOS CALDERÓN

Presidente de la República de Colombia

Ciudad

 

 

Respetado Señor Presidente:

 

Como consecuencia de los acontecimientos relacionados con la “Reforma Constitucional a la Justicia”, resulta evidente e inocultable el proceso de desinstitucionalización sufrido por la Sala Jurisdiccional Disciplinaria del Consejo Superior de la Judicatura, expresado no solo por las diferentes Ramas del Poder sino por la misma opinión pública.  Superada la crisis inicial y luego de observar el panorama y de realizar reflexiones muy personales, decidí el día de hoy radicar mi renuncia irrevocable ante el Señor Presidente del Congreso de la República,  la cual se hará efectiva a partir del primero (1°) de octubre del año en curso, permitiendo con ello que el Gobierno tenga el tiempo necesario para proponer la terna correspondiente e iniciar la recomposición de la Sala.

 

Renunció Señor Presidente luego de haber cumplido a plenitud los deberes impuestos por la Constitución y la ley, en tanto ejercí la magistratura con la dignidad, responsabilidad y probidad que el cargo exige.

 

Me retiro convencido que la Sala Jurisdiccional Disciplinaria del Consejo Superior de la Judicatura es un organismo indispensable en el sistema de pesos y contrapesos, creado por la Constitución Política de 1991.

 

Sin otro particular, con sentimientos de respeto y consideración.

 

Atentamente,

 

 

 

JORGE ARMANDO OTÁLORA GÓMEZ

Magistrado

 

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